28 de mayo de 2009

Aprenderás


Después de algún tiempo aprenderás la diferencia entre dar la mano y socorrer un alma y aprenderás que amar no significa apoyarse y que compañía no siempre significa seguridad.
Comenzarás a aprender que los besos nos son contratos, ni regalos ni promesas... y aceptarás tus derrotas con la cabeza erguida y la mirada al frente, con la gracia de un niño y no con la tristeza de un adulto.
Aprenderás a construir hoy todos tus caminos porque el terreno de mañana es incierto y el futuro tiene la costumbre de caer en el vacío...
Después de un tiempo aprenderás que el sol quema si te expones demasiado, aceptarás incluso que las personas buenas podrían herirte alguna vez y necesitarás algún día perdonarlas.
Aprenderás que hablar puede aliviar los dolores del alma... descubrirás que lleva años construir confianza y apenas unos segundos destruirla y que tu también podrás hacer cosas de las que te arrepentirás el resto de tu vida.
Aprenderás que no tenemos que cambiar de amigos si aceptamos que los amigos cambian. Te darás cuenta que puedes pasar buenos momentos con tu mejor amigo haciendo cualquier cosa o simplemente nada, sólo por el placer de disfrutar de su compañía... descubrirás que muchas veces tomas a la ligera a las personas que más te importan y que es necesario decirles siempre que las amamos porque nunca estaremos seguros de cuándo será la última vez que podamos hacerlo...
Aprenderás que las circunstancias y el ambiente que nos rodea tiene influencia sobre nosotros, pero nosotros somos los únicos responsables de lo que hacemos.Descubrirás que se lleva mucho tiempo para llegar a ser la persona que quieres se,y que el tiempo es corto. Aprenderás que no importa a dónde llegaste sino a qué lugar te diriges y si no sabes cualquier lugar sirve...Aprenderás que si no controlas tus actos ellos te controlarán y que ser flexible no significa ser débil, porque no importa cuán delicada y frágil sea una situación: siempre existen dos lados.
Aprenderás que héroes son las personas que hicieron lo necesario enfrentando las consecuencias.
Descubrirás que algunas veces, la persona que esperas que te patee cuando te caes, tal vez sea una de las pocas que te ayuden a levantarte... y que hay mucho más de tus padres en ti de lo que supones.
Aprenderás que cuando sientes rabia, tienes derecho a tenerla, pero eso no te da derecho a ser cruel.
Descubrirás que sólo porque alguien no te ama de la forma que quieres, no significa que no te ame con todo lo que puede, porque hay personas que nos aman pero no saben cómo demostrarlo...
Aprenderás que no siempre es suficiente ser perdonado por alguien, algunas veces tendrás que aprender a perdonarte a ti mismo. Aprenderás que con la misma severidad con que la juzgas, también serás juzgado y en algún momento condenado.
Aprenderás que no importa en cuantos pedazos tu corazón se partió, el mundo no se detiene para que lo arregles.
Descubrirás que en la vida hay cosas como el viento: que están pero no pueden ser vistas, y cosas como el río, que siempre se están llendo pero que nunca se van...

Entonces, sabrás realmente lo que puedes soportar, sabrás que eres fuerte y que podrás ir mucho más lejos de lo que pensabas cuando creías que no se podía más....
...Y es que ciertamente,
la vida realmente vale cuando tienes el valor de enfrentarla...



William Shakespeare

16 de mayo de 2009

Un paso más...


Era tarde, pero decidí salir a caminar un rato.
Una brisa fría golpeaba mi rostro. Pese a que antes de salir me había puesto un abrigo, el frío de la noche lograba estremecerme, cada paso era un recordatorio de la realidad.
Anduve por las calles de mi barrio disfrutando de la apacible oscuridad de la noche; normalmente mis andanzas por esos lares suelen estar asociados a tristeza, preocupación, nostalgia, ganas de volver a hacer cosas, horarios, ideas.
Hoy, sin embargo, caminaba solo para encontrarme. Hace mucho no me hacía el tiempo para conversar conmigo. Así que salí, y sentí una profunda melancolía.
Me encontré con una mujer distinta, me conmovió el sentirme fría. Tengo la mala costumbre de ceder a las corazas cuando me descuido. Este era el caso.

Advertí que mi falta de tiempo para ocuparte me de mí me había vuelto hermética a las sensaciones, y me estremecí. Recordé la fraese de una destacada psicóloga en una entrevista: "No existe la "falta de tiempo", esa frase es solo una excusa para no reconocer que tenemos prioridades diferentes a las que deberíamos tener...". Tenía razón, durante este ultimo tiempo prefería dedicarme a mi trabajo que a mi persona...
Hace tan solo unos meses estaba llena de luz, de sabiduría , de experiencia y encanto. Me recordé paseando por la orilla de la playa a la que solía visitar cada verano hasta ahora y esboce una sonrisa cuando vi mi angustia de entonces al pensar si debía dedicarme o no a una vida que no era la mía. Para ese entonces las cosas eran muy diferentes a lo que son hoy.

Tome un taxi, la desilusión me superó.

Mi esposo murió hace dos meses. Y no lo cuestiono, o al menos lucho por no hacerlo. Siempre he dicho que lo que nos ocurre es lo que estaba escrito para nosotros. Aun no me acostumbro. Me es inevitable no sentirme sola. Cuando te casas se supone que es para toda la vida, no esperas quedarte sola tan pronto. Creo que el recuerdo de las tantas conversaciones que tuvimos sobre este momento me da fuerzas, se que si estuviera aquí, le gustaría verme bien. Sé que si se fue es porque le era su minuto, se que si sigo aquí es porque aun no ha llegado el mio; y no forzare el momento, si estoy aquí es porque aun tengo cosas por hacer. Aunque se que podré vivir sin el, siento que con el murió una parte de mi.
Creo que uno de los mayores aprendizajes que me está dejando este proceso es vivir el hoy.
Hasta hace un tiempo vivía pensando en el mañana, la próxima semana, el próximo aniversario, la próxima fecha especial. Ese día, cuando llegue a mi casa, empecé a revisar nuestras cosas. No tenia claro como iba lograr deshacerme de todo eso. Sabía que algún día lo tendría que hacer. Y descubrí un vestido que tenía guardado para la "próxima vez que saliéramos a comer". Nunca lo vio. Sentí rabia conmigo por eso. ¿Por qué no ha usado el mismo día que lo compré?. ¿Acaso no era en sí un buen día para usarlo?. ¿Por qué tener que esperar la ocasión?... creo que es una de las cosas que corregiré.
Llegué a mi casa. La calidez del taxi logró entibiar mi corazón. Pese a que sentí una profunda tristeza al ver que aquella presencia mágica que me caracterizaba hasta hace algún tiempo se había ido, mi corazón estaba tranquilo. Es parte del proceso- me dije.
Decidí no pensar mas en eso para no dejar que la ansiedad estropeara todo lo que debiese venir a su debido tiempo. Aquella mujer de hace algunos meses debía volver, pero cuando fuese el momento indicado. Habían heridas que sanar, lágrimas que derramar, aun queda pena por sufrir para poder empezar de cero o desde el punto que estime conveniente para volver a empezar.

Cuando las personas no tienen prisa, no precipitan los acontecimientos con acciones inconsistentes. Sé que lo inevitable se manifestará, tal como ha ocurrido hasta ahora. Tengo la certeza de que volveré a ser la de antes porque sé que es mi esencia y ésta siempre encuentra la forma de volver a irradiar aun cuando aveces la crea perdida. Sé que lo voy a lograr. No ahora, porque no estoy preparada, pero confío en que lo haré porque creo en ello y mi fe en creer que puedo lograr lo que me proponga es lo que me mantiene en pié.

Definitivamente la elección de salir a caminar, por sobre quedarme en la cama viendo televisión, fue la indicada. Lo necesitaba. Creo que el aprendizaje de hoy es respetar la importancia de cada segundo, vivir cada momento con veneración, saber que cada momento es una buena ocasión, cada instante es un instante mágico que no se debe dejar pasar por pensar que vendrá otro mejor, vivir el hoy con lo que se tiene que vivir, no apresurar las cosas, pues cada una es un paso que conlleva en si una intrínseca dificultad.

Me voy a dormir. Mi corazón esta cálido nuevamente. Lloro, pero no de tristeza. Hoy di un paso mas. Me encontré nuevamente conmigo. Ya no estoy sola...


Simplemente Noa...


Dedicado a Daniel, por recordarme lo maravilloso que es escribir. Lo había dejado de lado, mis prioridades eran otras (por no decir que me faltaba tiempo. El dato de la psicóloga es real, el resto es solo parte de mi canalización de pensamientos a traves de historias, relatos que vienen a mi mente). Muchas gracias Daniel...

28 de mayo de 2009

Aprenderás


Después de algún tiempo aprenderás la diferencia entre dar la mano y socorrer un alma y aprenderás que amar no significa apoyarse y que compañía no siempre significa seguridad.
Comenzarás a aprender que los besos nos son contratos, ni regalos ni promesas... y aceptarás tus derrotas con la cabeza erguida y la mirada al frente, con la gracia de un niño y no con la tristeza de un adulto.
Aprenderás a construir hoy todos tus caminos porque el terreno de mañana es incierto y el futuro tiene la costumbre de caer en el vacío...
Después de un tiempo aprenderás que el sol quema si te expones demasiado, aceptarás incluso que las personas buenas podrían herirte alguna vez y necesitarás algún día perdonarlas.
Aprenderás que hablar puede aliviar los dolores del alma... descubrirás que lleva años construir confianza y apenas unos segundos destruirla y que tu también podrás hacer cosas de las que te arrepentirás el resto de tu vida.
Aprenderás que no tenemos que cambiar de amigos si aceptamos que los amigos cambian. Te darás cuenta que puedes pasar buenos momentos con tu mejor amigo haciendo cualquier cosa o simplemente nada, sólo por el placer de disfrutar de su compañía... descubrirás que muchas veces tomas a la ligera a las personas que más te importan y que es necesario decirles siempre que las amamos porque nunca estaremos seguros de cuándo será la última vez que podamos hacerlo...
Aprenderás que las circunstancias y el ambiente que nos rodea tiene influencia sobre nosotros, pero nosotros somos los únicos responsables de lo que hacemos.Descubrirás que se lleva mucho tiempo para llegar a ser la persona que quieres se,y que el tiempo es corto. Aprenderás que no importa a dónde llegaste sino a qué lugar te diriges y si no sabes cualquier lugar sirve...Aprenderás que si no controlas tus actos ellos te controlarán y que ser flexible no significa ser débil, porque no importa cuán delicada y frágil sea una situación: siempre existen dos lados.
Aprenderás que héroes son las personas que hicieron lo necesario enfrentando las consecuencias.
Descubrirás que algunas veces, la persona que esperas que te patee cuando te caes, tal vez sea una de las pocas que te ayuden a levantarte... y que hay mucho más de tus padres en ti de lo que supones.
Aprenderás que cuando sientes rabia, tienes derecho a tenerla, pero eso no te da derecho a ser cruel.
Descubrirás que sólo porque alguien no te ama de la forma que quieres, no significa que no te ame con todo lo que puede, porque hay personas que nos aman pero no saben cómo demostrarlo...
Aprenderás que no siempre es suficiente ser perdonado por alguien, algunas veces tendrás que aprender a perdonarte a ti mismo. Aprenderás que con la misma severidad con que la juzgas, también serás juzgado y en algún momento condenado.
Aprenderás que no importa en cuantos pedazos tu corazón se partió, el mundo no se detiene para que lo arregles.
Descubrirás que en la vida hay cosas como el viento: que están pero no pueden ser vistas, y cosas como el río, que siempre se están llendo pero que nunca se van...

Entonces, sabrás realmente lo que puedes soportar, sabrás que eres fuerte y que podrás ir mucho más lejos de lo que pensabas cuando creías que no se podía más....
...Y es que ciertamente,
la vida realmente vale cuando tienes el valor de enfrentarla...



William Shakespeare

16 de mayo de 2009

Un paso más...


Era tarde, pero decidí salir a caminar un rato.
Una brisa fría golpeaba mi rostro. Pese a que antes de salir me había puesto un abrigo, el frío de la noche lograba estremecerme, cada paso era un recordatorio de la realidad.
Anduve por las calles de mi barrio disfrutando de la apacible oscuridad de la noche; normalmente mis andanzas por esos lares suelen estar asociados a tristeza, preocupación, nostalgia, ganas de volver a hacer cosas, horarios, ideas.
Hoy, sin embargo, caminaba solo para encontrarme. Hace mucho no me hacía el tiempo para conversar conmigo. Así que salí, y sentí una profunda melancolía.
Me encontré con una mujer distinta, me conmovió el sentirme fría. Tengo la mala costumbre de ceder a las corazas cuando me descuido. Este era el caso.

Advertí que mi falta de tiempo para ocuparte me de mí me había vuelto hermética a las sensaciones, y me estremecí. Recordé la fraese de una destacada psicóloga en una entrevista: "No existe la "falta de tiempo", esa frase es solo una excusa para no reconocer que tenemos prioridades diferentes a las que deberíamos tener...". Tenía razón, durante este ultimo tiempo prefería dedicarme a mi trabajo que a mi persona...
Hace tan solo unos meses estaba llena de luz, de sabiduría , de experiencia y encanto. Me recordé paseando por la orilla de la playa a la que solía visitar cada verano hasta ahora y esboce una sonrisa cuando vi mi angustia de entonces al pensar si debía dedicarme o no a una vida que no era la mía. Para ese entonces las cosas eran muy diferentes a lo que son hoy.

Tome un taxi, la desilusión me superó.

Mi esposo murió hace dos meses. Y no lo cuestiono, o al menos lucho por no hacerlo. Siempre he dicho que lo que nos ocurre es lo que estaba escrito para nosotros. Aun no me acostumbro. Me es inevitable no sentirme sola. Cuando te casas se supone que es para toda la vida, no esperas quedarte sola tan pronto. Creo que el recuerdo de las tantas conversaciones que tuvimos sobre este momento me da fuerzas, se que si estuviera aquí, le gustaría verme bien. Sé que si se fue es porque le era su minuto, se que si sigo aquí es porque aun no ha llegado el mio; y no forzare el momento, si estoy aquí es porque aun tengo cosas por hacer. Aunque se que podré vivir sin el, siento que con el murió una parte de mi.
Creo que uno de los mayores aprendizajes que me está dejando este proceso es vivir el hoy.
Hasta hace un tiempo vivía pensando en el mañana, la próxima semana, el próximo aniversario, la próxima fecha especial. Ese día, cuando llegue a mi casa, empecé a revisar nuestras cosas. No tenia claro como iba lograr deshacerme de todo eso. Sabía que algún día lo tendría que hacer. Y descubrí un vestido que tenía guardado para la "próxima vez que saliéramos a comer". Nunca lo vio. Sentí rabia conmigo por eso. ¿Por qué no ha usado el mismo día que lo compré?. ¿Acaso no era en sí un buen día para usarlo?. ¿Por qué tener que esperar la ocasión?... creo que es una de las cosas que corregiré.
Llegué a mi casa. La calidez del taxi logró entibiar mi corazón. Pese a que sentí una profunda tristeza al ver que aquella presencia mágica que me caracterizaba hasta hace algún tiempo se había ido, mi corazón estaba tranquilo. Es parte del proceso- me dije.
Decidí no pensar mas en eso para no dejar que la ansiedad estropeara todo lo que debiese venir a su debido tiempo. Aquella mujer de hace algunos meses debía volver, pero cuando fuese el momento indicado. Habían heridas que sanar, lágrimas que derramar, aun queda pena por sufrir para poder empezar de cero o desde el punto que estime conveniente para volver a empezar.

Cuando las personas no tienen prisa, no precipitan los acontecimientos con acciones inconsistentes. Sé que lo inevitable se manifestará, tal como ha ocurrido hasta ahora. Tengo la certeza de que volveré a ser la de antes porque sé que es mi esencia y ésta siempre encuentra la forma de volver a irradiar aun cuando aveces la crea perdida. Sé que lo voy a lograr. No ahora, porque no estoy preparada, pero confío en que lo haré porque creo en ello y mi fe en creer que puedo lograr lo que me proponga es lo que me mantiene en pié.

Definitivamente la elección de salir a caminar, por sobre quedarme en la cama viendo televisión, fue la indicada. Lo necesitaba. Creo que el aprendizaje de hoy es respetar la importancia de cada segundo, vivir cada momento con veneración, saber que cada momento es una buena ocasión, cada instante es un instante mágico que no se debe dejar pasar por pensar que vendrá otro mejor, vivir el hoy con lo que se tiene que vivir, no apresurar las cosas, pues cada una es un paso que conlleva en si una intrínseca dificultad.

Me voy a dormir. Mi corazón esta cálido nuevamente. Lloro, pero no de tristeza. Hoy di un paso mas. Me encontré nuevamente conmigo. Ya no estoy sola...


Simplemente Noa...


Dedicado a Daniel, por recordarme lo maravilloso que es escribir. Lo había dejado de lado, mis prioridades eran otras (por no decir que me faltaba tiempo. El dato de la psicóloga es real, el resto es solo parte de mi canalización de pensamientos a traves de historias, relatos que vienen a mi mente). Muchas gracias Daniel...