16 de febrero de 2011

My Karma ran over your dogma...


El Karma

La palabra karma proviene del sanscrito karman que significa acción. Cabe destacar que tanto para el budismo y el hinduismo, estas acciones no son solo físicas, sino también incluyen las palabras, los pensamientos y todos los actos en general.

"Imaginemos que estamos frente a una enorme mesa de billar, tan grande como el universo, llena de una infinita cantidad de bolas de billar, cada una representando algún evento que pueda suceder.
Si un día cuando todo está quieto, golpearamos una de estas bolas, ésta con su movimiento afectaría a todas las demás. Un instante después del golpe, esta primera bola golpearía a otra y a su vez la segunda golpearía a una tercera, y así sucesivamente, muy pronto todas las bolas se estarían moviendo de una parte a otra, golpeándose entre sí, cambiando de trayectoria en cada golpe.
Así comienza una cadena infinita de eventos que producen otros eventos, y que a su vez, repercuten sobre otros sucesivamente..."

Este golpe inicial es el karma.

El karma es la acción inicial que se transporta, se repite y repercute en cada elemento del universo.
La ley del karma es el resultado inmediato de esta acción inicial, es el proceso infinito de causas y efectos que se producen como resultado de la acción. A esta ley se le conoce también como ley de causa y efecto, o ley de acción y reacción.
Es una ley universal de la cual ninguna persona puede escapar, pues todas las cosas que ocurren tienen una causa, y todas las cosas que hacemos provocan un efecto.
Cabe destacar que esta ley no tiene nada que ver con ningún castigo ni recompensa de ninguna divinidad, es una ley que funciona sola de forma autónoma y no es manejada ni gobernada por nadie; es un mecanismo automático natural y universal al que está sometido toda la creación.

Generalmente se tiene una percepción errada de lo que es el karma, asociándolo solo a las cosas negativas que nos puedan suceder de acuerdo a nuestras acciones. Esto es un error, pues la ley del karma, o ley de causa y efecto, es simplemente lo que su nombre indica, la forma en que los efectos tienen sus causas, y a su vez estos efectos serán causas de otros efectos sucesivamente. Estos efectos pueden ser percibidos como buenos o como malos, positivos o negativos para nuestra vida y para el entorno que nos rodea, por lo cual, es un error pensar que solamente son las cosas malas o negativas, las que nos puede suceder de acuerdo a nuestra forma de obrar.

El karma favorece la vida, la armonía y el equilibrio universal, así como también sus efectos, o sea la ley del karma, mantiene al universo funcionando en equilibrio.

Si no existiera esta ley, sucedería que ningún evento provocaría alteración y el universo quedaría paralizado.

Esta ley permite que las malas acciones que nosotros realizamos produzcan como consecuencia efectos que percibiremos como negativos, fundamentalmente en nuestras emociones y pensamientos, aunque también en un plano físico; y su manifestación puede ser inmediata, o bien incluso pueden llegar a tardar periodos que abarcan de una vida a otra. De la misma manera las acciones buenas que podamos realizar producirán efectos o consecuencias que vamos a percibir como positivas para nuestra vida o el entorno que nos rodea.

Es fundamental tener en cuenta que la ley del karma no premia ni castiga nada ni a nadie, la ley del karma es la que permite que el universo funcione equilibradamente.

El Karma, por su momento de formación puede dividirse en tres tipos:

Karma sanchita, que es el karma acumulado. Es el karma que viene de vidas anteriores, son los efectos que fueron provocados por eventos de vidas pasadas y que deben cumplirse en la vida presente.
Karma prarabhda, también llamado karma maduro, es el karma saldado o cumplido en la vida presente. Son las cosas que nos suceden en esta vida a causa de cosas que hemos hecho en el pasado. Si al momento de nuestra muerte quedara algo por saldar, este karma se transformaría en Karma sanchita.
Karma kriyamana, es el karma que está en formación, es el karma que está siendo formado en el momento presente, y que provocará sus efectos en el futuro. En algún momento se transformará en Karma prarabhda.

Otra clarificación del karma, se basa en su rigor, encontrándonos así con:

Karma adradha o karma evitable o Karma Blando, corresponde a aquellas cosas que nos van a suceder de acuerdo a las acciones que estamos tomando, pero que pueden modificarse si modificamos nuestras acciones.
Karma dradha o karma inevitable o Karma Duro, corresponde a aquellas cosas que nos van a suceder y que no pueden ser evitadas de ninguna manera.
Karma dradha-adradha o karma evitable con mucho esfuerzo o Karma Medio, corresponde a aquellas cosas que están marcadas en nuestro destino pero que con mucho esfuerzo podremos evitar.

Las gunas son las cualidades de la naturaleza o materia primordial. Estas tres tendencias o componentes de la naturaleza son sattwa guna, rajas guna, y tamas guna.

La Sattwa guna o forma armónica de obrar o forma consciente, alberga a aquellas personas que siguen en dharma; son personas más conscientes y despiertas. Son personas que eligen hacer lo que deben hacer y no hacen lo que le conviene al ego. Estas personas a veces logran anular completamente su karma, y siempre se encuentran dentro del karma adradha o karma blando. Jaña sattwico o forma de culto armónico y con conciencia: es practicar nuestros cultos de forma secreta y privada, sin asistir a templos que están atiborrados de gente, cuando nadie nos ve, cuando el culto realmente se hace de corazón, sin ostentación y sin querer aparentar nada.

Por otro lado, Rayas guna o forma de obrar emocional, alberga a todas las personas que viven en el mundo de la pasión, del interés y de la apariencia. Es usual que este tipo de personas les toque un karma dradha-adradha o karma medio.En cuanto a la compasión significa obrar con el ego, buscar la ostentación y que todas las demás personas siempre digan lo mejor de nosotros, estar pendiente de las apariencias. Ayudar a la gente pero siempre buscar la forma de que todos se enteren de nuestras buenas acciones. Es una forma interesada de obrar.
Jaña rayasico o forma de culto emocional: es cuando buscamos que las demás personas se enteren de lo fieles o míticos que somos, cuando asistimos a un templo y nos aseguramos que todos los demás nos vean, cuando hablamos de Dios constantemente y hacemos que todas las demás personas se enteren de lo religioso que somos.

Finalmente tenemos la Tamas guna o forma de obrar por inercia, que alberga a todas las personas a las que le van pasando cosas malas en la vida, y que se van dejando llevar por su desgracia y no hacen ningún esfuerzo por superarse. A estas personas les toca un karma duro o Karma dradha.En cuanto a la compasión significa obrar con desdén y sin darle importancia a las personas. Es ayudar por ayudar sin saber y sin evaluar si se está haciendo el bien o se está haciendo el mal.
Jaña tamasico: es cuando las personas asisten a los cultos por obligación y sin ganas.

El dharma

La palabra dharma significa "propósito en la vida", de manera que cuando la persona descubre cuál es su propósito en la vida y sigue ese camino sin desviarse, está siguiendo de esta forma el camino del dharma.
Seguir el camino del dharma es hacer siempre lo que debemos hacer y nunca lo que le conviene al ego. Es ser honesto y sincero consigo mismo, es jamás guiarse por las apariencias, es ayudar a las personas desinteresadamente y en silencio. Es tener constancia, criterio y claridad de objetivo, es hacer todo lo que debemos hacer para unir lo que una vez fue separado, es seguir el camino de la auténtica y verdadera religión (religión proviene de la palabra latina religare que significa volver a unir).
Si se sigue el camino del dharma, poco a poco las cosas se hacen más livianas y más fáciles, llegando a un punto en el que todo karma se transforma en karma blando, e incluso una gran cantidad de karma desaparece completamente porque la persona tiene el poder de operar sobre las causas de las cosas...


“Cada uno es responsable de lo que le sucede y tiene el poder de decidir lo que quiere ser. Lo que eres hoy es el resultado de tus decisiones y elecciones en el pasado. Lo que seas mañana será consecuencia de tus actos de hoy”.
Swami Vivekananda

Simplemente Noa

"My karma ran over your dogma..."

1 comentario:

Antonio dijo...

Gracias por tu vista...
A mi también me ha gustado tu blog. Pasaré a visitarte.

Un cálido abrazo

16 de febrero de 2011

My Karma ran over your dogma...


El Karma

La palabra karma proviene del sanscrito karman que significa acción. Cabe destacar que tanto para el budismo y el hinduismo, estas acciones no son solo físicas, sino también incluyen las palabras, los pensamientos y todos los actos en general.

"Imaginemos que estamos frente a una enorme mesa de billar, tan grande como el universo, llena de una infinita cantidad de bolas de billar, cada una representando algún evento que pueda suceder.
Si un día cuando todo está quieto, golpearamos una de estas bolas, ésta con su movimiento afectaría a todas las demás. Un instante después del golpe, esta primera bola golpearía a otra y a su vez la segunda golpearía a una tercera, y así sucesivamente, muy pronto todas las bolas se estarían moviendo de una parte a otra, golpeándose entre sí, cambiando de trayectoria en cada golpe.
Así comienza una cadena infinita de eventos que producen otros eventos, y que a su vez, repercuten sobre otros sucesivamente..."

Este golpe inicial es el karma.

El karma es la acción inicial que se transporta, se repite y repercute en cada elemento del universo.
La ley del karma es el resultado inmediato de esta acción inicial, es el proceso infinito de causas y efectos que se producen como resultado de la acción. A esta ley se le conoce también como ley de causa y efecto, o ley de acción y reacción.
Es una ley universal de la cual ninguna persona puede escapar, pues todas las cosas que ocurren tienen una causa, y todas las cosas que hacemos provocan un efecto.
Cabe destacar que esta ley no tiene nada que ver con ningún castigo ni recompensa de ninguna divinidad, es una ley que funciona sola de forma autónoma y no es manejada ni gobernada por nadie; es un mecanismo automático natural y universal al que está sometido toda la creación.

Generalmente se tiene una percepción errada de lo que es el karma, asociándolo solo a las cosas negativas que nos puedan suceder de acuerdo a nuestras acciones. Esto es un error, pues la ley del karma, o ley de causa y efecto, es simplemente lo que su nombre indica, la forma en que los efectos tienen sus causas, y a su vez estos efectos serán causas de otros efectos sucesivamente. Estos efectos pueden ser percibidos como buenos o como malos, positivos o negativos para nuestra vida y para el entorno que nos rodea, por lo cual, es un error pensar que solamente son las cosas malas o negativas, las que nos puede suceder de acuerdo a nuestra forma de obrar.

El karma favorece la vida, la armonía y el equilibrio universal, así como también sus efectos, o sea la ley del karma, mantiene al universo funcionando en equilibrio.

Si no existiera esta ley, sucedería que ningún evento provocaría alteración y el universo quedaría paralizado.

Esta ley permite que las malas acciones que nosotros realizamos produzcan como consecuencia efectos que percibiremos como negativos, fundamentalmente en nuestras emociones y pensamientos, aunque también en un plano físico; y su manifestación puede ser inmediata, o bien incluso pueden llegar a tardar periodos que abarcan de una vida a otra. De la misma manera las acciones buenas que podamos realizar producirán efectos o consecuencias que vamos a percibir como positivas para nuestra vida o el entorno que nos rodea.

Es fundamental tener en cuenta que la ley del karma no premia ni castiga nada ni a nadie, la ley del karma es la que permite que el universo funcione equilibradamente.

El Karma, por su momento de formación puede dividirse en tres tipos:

Karma sanchita, que es el karma acumulado. Es el karma que viene de vidas anteriores, son los efectos que fueron provocados por eventos de vidas pasadas y que deben cumplirse en la vida presente.
Karma prarabhda, también llamado karma maduro, es el karma saldado o cumplido en la vida presente. Son las cosas que nos suceden en esta vida a causa de cosas que hemos hecho en el pasado. Si al momento de nuestra muerte quedara algo por saldar, este karma se transformaría en Karma sanchita.
Karma kriyamana, es el karma que está en formación, es el karma que está siendo formado en el momento presente, y que provocará sus efectos en el futuro. En algún momento se transformará en Karma prarabhda.

Otra clarificación del karma, se basa en su rigor, encontrándonos así con:

Karma adradha o karma evitable o Karma Blando, corresponde a aquellas cosas que nos van a suceder de acuerdo a las acciones que estamos tomando, pero que pueden modificarse si modificamos nuestras acciones.
Karma dradha o karma inevitable o Karma Duro, corresponde a aquellas cosas que nos van a suceder y que no pueden ser evitadas de ninguna manera.
Karma dradha-adradha o karma evitable con mucho esfuerzo o Karma Medio, corresponde a aquellas cosas que están marcadas en nuestro destino pero que con mucho esfuerzo podremos evitar.

Las gunas son las cualidades de la naturaleza o materia primordial. Estas tres tendencias o componentes de la naturaleza son sattwa guna, rajas guna, y tamas guna.

La Sattwa guna o forma armónica de obrar o forma consciente, alberga a aquellas personas que siguen en dharma; son personas más conscientes y despiertas. Son personas que eligen hacer lo que deben hacer y no hacen lo que le conviene al ego. Estas personas a veces logran anular completamente su karma, y siempre se encuentran dentro del karma adradha o karma blando. Jaña sattwico o forma de culto armónico y con conciencia: es practicar nuestros cultos de forma secreta y privada, sin asistir a templos que están atiborrados de gente, cuando nadie nos ve, cuando el culto realmente se hace de corazón, sin ostentación y sin querer aparentar nada.

Por otro lado, Rayas guna o forma de obrar emocional, alberga a todas las personas que viven en el mundo de la pasión, del interés y de la apariencia. Es usual que este tipo de personas les toque un karma dradha-adradha o karma medio.En cuanto a la compasión significa obrar con el ego, buscar la ostentación y que todas las demás personas siempre digan lo mejor de nosotros, estar pendiente de las apariencias. Ayudar a la gente pero siempre buscar la forma de que todos se enteren de nuestras buenas acciones. Es una forma interesada de obrar.
Jaña rayasico o forma de culto emocional: es cuando buscamos que las demás personas se enteren de lo fieles o míticos que somos, cuando asistimos a un templo y nos aseguramos que todos los demás nos vean, cuando hablamos de Dios constantemente y hacemos que todas las demás personas se enteren de lo religioso que somos.

Finalmente tenemos la Tamas guna o forma de obrar por inercia, que alberga a todas las personas a las que le van pasando cosas malas en la vida, y que se van dejando llevar por su desgracia y no hacen ningún esfuerzo por superarse. A estas personas les toca un karma duro o Karma dradha.En cuanto a la compasión significa obrar con desdén y sin darle importancia a las personas. Es ayudar por ayudar sin saber y sin evaluar si se está haciendo el bien o se está haciendo el mal.
Jaña tamasico: es cuando las personas asisten a los cultos por obligación y sin ganas.

El dharma

La palabra dharma significa "propósito en la vida", de manera que cuando la persona descubre cuál es su propósito en la vida y sigue ese camino sin desviarse, está siguiendo de esta forma el camino del dharma.
Seguir el camino del dharma es hacer siempre lo que debemos hacer y nunca lo que le conviene al ego. Es ser honesto y sincero consigo mismo, es jamás guiarse por las apariencias, es ayudar a las personas desinteresadamente y en silencio. Es tener constancia, criterio y claridad de objetivo, es hacer todo lo que debemos hacer para unir lo que una vez fue separado, es seguir el camino de la auténtica y verdadera religión (religión proviene de la palabra latina religare que significa volver a unir).
Si se sigue el camino del dharma, poco a poco las cosas se hacen más livianas y más fáciles, llegando a un punto en el que todo karma se transforma en karma blando, e incluso una gran cantidad de karma desaparece completamente porque la persona tiene el poder de operar sobre las causas de las cosas...


“Cada uno es responsable de lo que le sucede y tiene el poder de decidir lo que quiere ser. Lo que eres hoy es el resultado de tus decisiones y elecciones en el pasado. Lo que seas mañana será consecuencia de tus actos de hoy”.
Swami Vivekananda

Simplemente Noa

"My karma ran over your dogma..."

1 comentario:

Antonio dijo...

Gracias por tu vista...
A mi también me ha gustado tu blog. Pasaré a visitarte.

Un cálido abrazo